
Chile, con un hombre menos durante buena parte del partido, optó por el mal menor y aferró un meritorio empate de local 0-0 ante Uruguay, incapaz de quebrar a su rival, por las eliminatorias del Mundial 2010.
A los 37' de juego fue expulsado, por doble amonestación, el volante chileno Mauricio Isla, cuando Chile había creado varias ocasiones y se mostraba con un muy buen control del juego y ofensivo.
La polémica decisión del árbitro argentino Héctor Baldassi desató un cambio en el rumbo del partido, que llevó al conjunto que dirige el argentino Marcelo Biela a refugiarse en su sector defensivo, para no arriesgar y exponerse a una caída.
Los jugadores chilenos mostraron cierto desgaste físico, fundamentalmente el capitán Matías Fernández, del Villarreal de España, lo que fue determinante en el juego del conjunto local.
El empate y la expulsión del primer tiempo anticipaba lo peor para los locales, considerando que Uruguay, con su técnico Oscar Tabaréz decidido, iba a animarse a una estrategia más de ataque al amparo del desnivel numérico.
Sin embargo, Uruguay fue sólo intención y no tuvo claridad para vencer a los chilenos, como lo había hecho el sábado ante Paraguay, el líder de la eliminatoria sudamericana.
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